Este pin metálico tipo enamel del icónico “Tongue & Lips” es una pieza diseñada para quienes viven el rock como una extensión natural de su personalidad. El acabado brillante, la intensidad del rojo y el contorno metálico generan una presencia visual sólida, auténtica y con carácter.
Perfecto para chaquetas, morrales o colecciones de alto voltaje emocional, este accesorio no es solo un detalle: es una declaración de identidad.

Un homenaje en miniatura a una de las eras más imponentes del heavy metal. Este pin metálico tipo hard enamel, inspirado en el arte de Powerslave, captura la estética épica, mística y monumental que caracteriza esta etapa de Iron Maiden.
Los tonos intensos, el brillo del esmaltado y los contornos metálicos evocan la grandeza visual del álbum, convirtiendo esta pieza en un accesorio de identidad para quienes llevan el metal como filosofía de vida.
Una pieza compacta cargada de historia, poder y mística.

Hay discos que no solo se escuchan… se sienten como un reencuentro.
Perfect Strangers es exactamente eso: una etapa donde Deep Purple volvió a demostrar que el hard rock puede ser elegante, profundo y poderoso sin necesidad de aspavientos.

Llevarlo puesto es un guiño silencioso pero contundente: “Sí, conozco la historia. Y sí, estuve ahí, incluso si fue a través de los vinilos.”No es solo un accesorio,es un capítulo portátil del rock clásico.

Una pieza que captura el espíritu crudo, auténtico y visceral del grunge. Este pin metálico tipo hard enamel del ángel de Nevermind es una declaración visual para quienes entienden que Nirvana no fue una moda: fue un punto de quiebre cultural.
El esmalte brillante, los contornos metálicos y la estética minimalista elevan esta pieza a un accesorio de colección que combina nostalgia, identidad y carácter.
Un detalle pequeño con una historia enorme —rock en estado puro

Energía pop-punk convertida en accesorio de colección. Este pin metálico tipo hard enamel inspirado en Blink-182 combina un fondo amarillo vibrante, arte en azul eléctrico y el clásico logo rojo que define a la banda.
El brillo del esmalte y el contorno metálico hacen que cada detalle resalte con actitud juvenil, irreverente y fresca—ideal para quienes crecieron entre baterías rápidas, melodías pegajosas y espíritu skate.
Una pieza compacta, sólida y visualmente poderosa.

Este pin condensa el espíritu salvaje que Slipknot ha construido desde los sótanos hasta los grandes festivales: intensidad pura, energía que no pide permiso, identidad que te marca. El logo rojo vibra como si estuviera recién salido del círculo de caos del escenario, contrastando con un fondo blanco que amplifica el golpe visual.
Es una pieza pensada para quienes entienden que Slipknot no es solo música: es un lenguaje emocional, un desahogo y una forma de pertenecer.

Hay bandas que no solo marcaron una época… la definieron.
Aerosmith es ese sonido que huele a carretera, a rebeldía refinada, a noches donde el rock tenía brillo propio sin perder la suciedad que lo hacía auténtico.El metal que sostiene todo como la columna vertebral de un clásico que nunca se apaga.

Llevarlo puesto es decir sin hablar:“Sí, crecí con riffs que se sienten como un motor encendido. Sí, entiendo lo que es el hard rock con clase.” No es un simple accesorio.Es una pieza que viaja contigo como un recordatorio portátil de por qué Aerosmith sigue siendo sinónimo de estrellato y calle al mismo tiempo.

Hay bandas que no buscan agradar… buscan despertar fuerzas.
Morbid Angel es eso: la estética del caos, la oscuridad como arte y una energía que no se parece a nada más en el metal extremo.

Este pin encarna ese espíritu sin suavizarlo.No es sólo un pin, Es un fragmento de la estética más radical del metal extremo, listo para acompañarte en cada escena.

Hay canciones que no empiezan: caen como un martillazo.
Hell’s Bells es de esas. El sonido de la campana no es solo un intro: es un anuncio, un llamado, una entrada triunfal hacia el poder puro del hard rock.

Este pin metálico captura esa vibra icónica con la silueta firme que evoca ese instante en el que el escenario tiembla y todo se enciende.  AC/DC sigue siendo parte de nuestro ADN y por eso no es un accesorio. Es un símbolo inmortal del rock más crudo y eléctrico.

Hay símbolos que se vuelven himnos visuales.
La calabaza de Helloween es exactamente eso: una marca registrada del power metal que definió a toda una generación… y sigue marcando el ritmo décadas después.

Un pin pensado para quienes viven entre la luz y la oscuridad del rock melódico.
Una micro-reliquia que grita Halloween… en cualquier época del año.

El teatro del horror nunca tuvo un embajador más elegante que King Diamond.
Este pin lo encapsula como una fotografía convertida en icono: La máscara, el sombrero, la expresión fría como un storytelling macabro en vivo.

Es minimalista, pero transmite más que muchos pósters.
Un pin pensado para fans que entienden que el metal también puede ser conceptual, performático y técnicamente impecable.

Ponértelo es un statement de branding personal:
“Me gustan las narrativas fuertes. Y sí, también las historias que inquietan.”

Antes de que el heavy metal fuera una industria global, Diamond Head ya estaba escribiendo su blueprint.
Este pin rinde tributo a ese legado: crudo, eléctrico, visionario.

Las líneas, afiladas como los riffs que inspiraron a toda la NWOBHM.
El diseño, limpio pero imponente, como un trueno previo a detonar un estadio.

Llevarlo es alinear tu branding personal con los fundadores de un sonido que cambió la historia.
Una pieza que habla en frecuencias altas: puro heavy metal estratégico.